Out of topic: Carolina Bescansa y su bebé, ¿reivindicación o circo?

Ayer en el Congreso sucedió algo raro de ver, difícil de explicar y más aún de entender. Esta opinión no la doy en base a mis ideas políticas (que me las reservo) ni mucho menos. La doy como mujer.

En primer lugar, me espanta enormemente ver cómo se utiliza a un bebé de tan sólo seis meses para montar un verdadero circo a su alrededor. Como mujer, no quiero esa clase de vida para mis hijos. No me imagino yendo al trabajo con mi hijo en brazos, dándole el pecho en reuniones, o negociando y cambiándole el pañal. Es simplemente ridículo imaginar este hecho, y por lo tanto el acto reivindicativo de Carolina Bescansa lo es.

FOTO de JOSE LUIS ROCA

No ayuda para nada que una mujer lleve a su hijo al trabajo. ¿Os imagináis que cada una llevase a los suyos a trabajar? ¿Se podría trabajar bien? Y, teniendo en cuenta que ella lo ha hecho, ¿por qué no todas nos llevamos a nuestros hijos a trabajar? ¿Si ella puede, por qué las demás no?

Simplemente porque no tiene sentido. Si bien es cierto que es difícil conciliar la vida familiar y profesional, en España afortunadamente las mujeres tenemos facilidades como la reducción de jornada, ayudas a madres trabajadoras, baja maternal, etc. Carolina, ¿era necesario sacarte el pecho y dar de mamar a tu hijo delante de todas las cámaras? ¿Y de verdad era necesario tenerlo en brazos y que estuviera la niñera al lado pudiéndote ayudar? Y por otra parte, ¿te resulta de verdad difícil conciliar vida familiar y laboral teniendo niñera 24 horas?
No es mala la madre trabajadora, ni la que no da el pecho por decisión propia, ni mucho menos la que decide dedicarse en cuerpo y alma a sus hijos y no trabajar. Este acto ha reivindicado la vergüenza, lo absurdo, el sinsentido. Este acto debería no haber existido nunca. Vivan las amas de casa, las madres trabajadoras. Vivan las mujeres, vivan todas ellas. Y dejemos todo lo demás de lado.

Carmen.